jueves, 29 de abril de 2010

Avestruz

El Avestruz es el ave más grande que ha logrado sobrevivir hasta nuestros días. Al igual que las otras aves grandes - los ñandúes, los casuarios y el emú - pertenece al grupo de aves conocido como las rátidas. Estas aves, incluyendo al avestruz, se caracterizan por no poder volar. Se han adaptado a una vida terrestre, las piernas las tienen bien desarrolladas y fuertes.

En la naturaleza el avestruz vive en las llanuras de África. También se ha establecido como animal salvaje en algunas regiones de Australia. Su carne y sus plumas siempre han sido muy codiciadas, y por tanto cazado hasta la exterminación en algunos lugares. Tanto así, que en el siglo XIX se establecieron granjas en muchas partes del mundo, Sudáfrica y Australia llegando a ser las principales criadoras. Tal implementación dio lugar a razas domésticas, tal y como existen en los caballos, perros, gallinas, etc. En años recientes ha vuelto a crecer el interés y ahora se usa hasta la piel para cuero de zapatos.

El avestruz macho se diferencia de la hembra por ser más grande. También tiene las plumas del cuerpo negras y las del borde de las alas y la cola blancas. El plumaje de las hembras es color gris opaco, con menos plumas blancas en las alas.

El avestruz macho llega alcanzar los 2.7 metros de altura y pesar 145 Kg. Las largas patas le hacen posible una velocidad de 60 a 70 km/h. Los huevos son blancos y grandes, pesando alrededor de 1.6 Kg.

Cuando llega la temporada del celo, el macho defiende un área o territorio. Selecciona el lugar del nido, un pequeño claro en la tierra escarbado con las patas, y con una danza muy vistosa invita a una hembra a formar la familia. El futuro papá se echa en la tierra y como si fuera al compás de una pieza musical clásica, levanta un ala mientras recoge la otra a la vez que alza y baja la cola. El borde de las alas, que tienen el aspecto de grandes abanicos, y la cola están constituidos de plumas blancas muy atractivas tanto a los seres humanos como a la futura mamá que queda embelesada con tal cortejo.

Avestruz hembra

Una vez que se establece la pareja, la hembra empieza a poner. Acto seguido el macho incita, con la misma danza, a otras hembras para que también contribuyan en la nidada. Es normal que hasta cinco de estas hembras secundarias tomen parte en la puesta. Ponen su huevo, con el permiso de la hembra de la pareja, y se marchan. Una vez que el nido contiene unos 20 huevos, el macho los empieza ha incubar sentándose sobre ellos por las noches. La hembra los calienta durante las horas del día.

La nidada puede tener más de 20 huevos, en la naturaleza se han documentado que han excedido los 70, pero usualmente no nacen más de 20 pichones. El promedio de huevos de la hembra primaria es de unos ocho y es ella quien los acomoda. De alguna forma puede distinguir los propios de los de las otras hembras y los organiza cosa que los suyos se encuentren al centro, de tal forma teniendo mejores posibilidades de lograrse.

La incubación se toma unas seis semanas, sacando todos el mismo día. Pronto la familia se marcha del lugar del nido y al tercer día ya se encuentran en marcha. Cuando se topan con otra familia de avestruces, los padres se disputan el derecho de cuidar a los pequeñuelos. Terminando una de las dos parejas con todos los pichones, y así se ven por las sabanas del África las parejas con más de cien pichones de todos los tamaños. Se ha documentado un grupo con casi 400 jóvenes.

La familia permanece junta por casi un año, hasta la próxima temporada del celo. Cuando un peligro acecha a la familia, normalmente toman medidas elusivas. Pero si el papá se tiene que enfrentar al agresor, pobre agresor. De una patada le han partido el cráneo a un hombre, y se sabe que hayan matado leones de la misma manera. Eventualmente los jóvenes se separan de los adultos para formar sus propios grupos. Ya al tercer o cuarto año empiezan a criar por sí mismos. Aquellos que logren sobrevivir, se les estima una longevidad de unos 40 años en su estado salvaje, en cautiverio pueden lograr los 50 años.

Al avestruz en inglés se le conoce por Ostrich. En francés se le llama Autruche.


Algunos Datos
Habitat: Sabanas y llanuras donde hay arbustos. Lugares donde predomina la hierba y regiones semiáridas.
Hábitos: En algunas poblaciones los adultos se mantienen en grupos de media docena a una docena. En otros lugares son solitarios o en parejas.
Dimensiones: La altura usual es de 2.0 a 2.5 metros. La altura máxima de los machos es 2.74 metros. El peso máximo de los machos es de 156 Kg.
Anidación: Todo el año en algunas partes. Al sur del continente en primavera y otoño. Anidan solitarios.
Huevos: Son color crema claro a blancos. Miden unos 15 por 12 cm.
Incubación: Toma unos 42 días. Los dos géneros incuban, el macho pasa más tiempo sobre los huevos.
Alimentación: En su mayor parte de alimenta de hierbas y otras plantas.
Amenazas: Adultos: los leones, aunque las avestruces adultas normalmente escapan si el león no las sorprende. Huevos: Los chacales.
Sonidos: Normalmente son silentes. Hay veces emiten un siseo. Cuando están criando los machos emiten un sonido similar al rugido de los leones sin las vibraciones.
Visión: Excelente.

Hipopotamo


El hipopótamo común (Hippopotamus amphibius, gr. Ιππος (hippos), "caballo" y Ποταμοςpotamos), "río"; "caballo de río") es un gran mamífero artiodáctilo herbívoro que habita en África. Es uno de los dos miembros actuales de la familia Hippopotamidae —el otro es el hipopótamo pigmeo (Choeropsis liberiensis)—. Los griegos de la época clásica designaban a este animal como "caballo de río", los árabes lo llamaban "búfalo de agua" y los antiguos egipcios "cerdo de río".

El hipopótamo es un animal semiacuático; habita ríos y lagos del África sub-sahariana en grupos de hasta 40 individuos. Durante el día reposan en el agua o en el fango. Tanto la cópula como el parto de este animal suceden en el agua. Al anochecer se activan y salen a comer hierba. Aunque los hipopótamos están juntos en el agua, el pasto es una actividad solitaria, aunque no son territoriales en la tierra.

Los animales pueden llegar hasta una longitud de 4.5 metros de largo y pesan de 1,500 a 1,800 kg los machos y de 1,300 a 1,500 kg las hembras.

Características

En primer lugar, el hipopótamo se diferencia de los restantes mamíferos por la cabeza, que tiene una forma casi cuadrada, con orejas y ojos minúsculos y grandes narices oblicuas y arqueadas; la nariz y los otros órganos sensoriales constituyen los puntos más elevados de una superficie en la que la frente y la región facial se hunden, formando una concavidad. El cuello es corto y robusto; el cuerpo alargado y enormemente grueso, con el dorso más elevado en la grupa que en la cruz y hundido en la parte central; el vientre amplio y redondeado, es colgante y llega a rozar el suelo cuando el animal camina por un terreno pantanoso. La cola es corta y delgada (puede llegar hasta los 50 cm). Extraordinariamente cortas e informes son las patas, con los pies anchos, provistos de cuatro pezuñas, y los dedos dirigidos hacia delante y unidos entre sí por membranas natatorias. En la punta de la cola aparecen unas cortas cerdas, semejantes a alambres; el resto del cuerpo está casi completamente desnudo, ya que sobre la piel, de más de 2 cm de espesor, con pliegues en el pecho y en el cuello, sólo se aprecian algunos pelos cerdosos. Los surcos de la piel, entrecruzándose entre sí, hacen que ésta aparezca como dividida en zonas de distintos tamaños, de color castaño rojizo muy oscuro en la parte superior del cuerpo y castaño purpúreo claro en la inferior. Numerosas manchas castañas y azuladas, dispuestas con bastante regularidad, dan al conjunto un color muy vivo, que al quedar expuesto directamente a los rayos del sol adquiere un matiz gris azulado. El hipopótamo es un animal estrechamente ligado al agua y pasa casi todo el día descansando en ella. Su piel está especialmente adaptada para eso: es lisa, grasienta y sin pelos, aunque su epidermis es muy delgada.Las profundas heridas que se infieren en las peleas raramente se infectan y cicatrizan rápidamente.

Los caninos de la mandíbula inferior tienen la apariencia de dos gigantescos colmillos, que a veces pueden superar la longitud de 50 cm y alcanzar un peso de 4 kg; son triangulares, curvados en forma de media luna, romos en su extremo y provistos de surcos longitudinales. Los colmillos de la mandíbula superior son mucho más cortos y débiles, y también curvados y romos en su extremo. Entre las peculiaridades del hipopótamo hay que señalar también su estómago, dividido en tres porciones o cámaras.

Posee depredadores, como el león, la hiena, y el cocodrilo en el caso de las crías.

Hábitat

Hoy día es preciso internarse mucho en África central para encontrar hipopótamos: incluso los que vivían en el Nilo han sido desplazados poco a poco hacia el centro del continente; es decir, hacia las fuentes del gran río. Actualmente, habiendo desaparecido del todo de Egipto y de Nubia, el hipopótamo se encuentra distribuido irregularmente desde el alto Nilo hasta el Congo y Gambia y, hacia el sur, en varias zonas de África centromeridional. En los ríos, donde el nivel del agua varía con las estaciones, lleva una vida nómada: al descender el caudal se encamina, en manadas, curso abajo, hacia la desembocadura; en cambio, cuando las lluvias lo aumentan, el hipopótamo se remonta hacia las fuentes. Este animal se halla vinculado al agua más que ningún otro paquidermo y sólo se aparta de ella en raras ocasiones, cuando realmente se ve forzado a ello; por ejemplo, cuando en el río escasean las plantas que constituyen su sustento; entonces el hipopótamo se adentra en el bosque en busca de comida. Generalmente lo hace por la noche, pero algunas veces también suele hacerlo de día. Cuando sube a la orilla, sólo ha de recorrer un breve trecho para encontrarse en el interior de la selva.En su grupo, el hipopótamo está bien estructurado. Los hembras y los machos jóvenes se ubican más o menos juntos en el agua. Los machos mayores se colocan alrededor de ellos, manteniendo prudente distancia, ya que son muy agresivos. Las peleas entre ellos son muy violentas, pero raramente terminan con la muerte.

Alimentación

La dieta de este animal se compone generalmente de vegetales, aunque se tiene constancia de que en ocasiones comen carne, principalmente carroña, pequeños animales o presas robadas a depredadores como leones, ya que su estómago también acepta alimentos cárnicos al igual que muchos de los animales de su mismo suborden. Ver comer a uno de estos enormes animales no es, ciertamente, un espectáculo agradable: la enorme cabeza desaparece bajo el agua, donde arranca las plantas del fondo enturbiando el líquido a causa del fango removido; después reaparece con un gran haz de tallos, tan grande que casi no puede sujetarlo con la boca; lo deposita en la superficie del agua y, acto seguido, lo va engullendo con lentitud y satisfacción; entonces, por ambos lados de la boca cuelgan tallos y hojas, mientras del hinchado belfo gotea un jugo verdoso, mezclado con saliva; entretanto, los inexpresivos ojos parecen mirar al vacío y los enormes incisivos y los grandes colmillos se muestran en sus impresionantes dimensiones. Muy distinto es lo que sucede cuando el hipopótamo se ve obligado a comer en tierra firme. Aproximadamente una hora después de la puesta del sol, el animal sale del río, con las orejas y los ojos dipuestos a captar la menor señal de peligro. En las proximidades de los poblados irrumpe en los sembrados y produce gravísimos daños, destruyendo muchas veces, en una sola noche, toda una plantación.

Respiración

El hipopótamo no puede permanecer mucho tiempo inmerso en el agua sin respirar (5/6 minutos como máximo). Cuando es molestado, sube a la superficie sin hacer ruido y respira despacio, dejando que sólo la nariz sobresalga del agua, de tal manera que muchas veces no se le ve. Otras veces se sumerge silenciosamente y vuelve a subir a la superficie en un punto distinto del río, mientras en el lugar donde se hallaba aparece cualquier otro individuo.

Grupos sociales

Estos animales viven en sociedad; únicamente los machos viejos permanecen aislados.Los hipopótamos viven en pequeñas manadas de no más de diez a quince ejemplares. Pese a esto, en zonas muy favorables se han visto manadas de más de cien individuos. Aunque también algunos machos prefieren vivir solos. Basta un amplio estanque para hospedar a todo un rebaño. Cuando se hallan en un río poco profundo, en el que sobresalen algunas partes del fondo en períodos de sequía, los animales pasan todo el día en un mismo lugar. Pero en tales casos excavan grandes hoyos en el lecho del río, en la misma dirección de la corriente, para hallar en ellos refugio si se ven amenazados por los cazadores. El rebaño únicamente sale del agua durante el día en las regiones mas despobladas; como les gusta tomar el sol, los hipopótamos se tumban y dormitan cerca de la orilla, echados mitad en el agua y mitad sobre la tierra. De vez en cuando los machos gruñen como los cerdos y levantan perezosamente la cabeza para observar lo que sucede a su alrededor, pero no lo hacen por temor a posibles ataques, ya que sólo en los lugares donde han aprendido a conocer al hombre y sus armas de fuego se muestran recelosos, atentos y vigilantes. En realidad, el hombre ha sido su mayor o, mejor dicho, su único enemigo. Hacia el atardecer todo el grupo se anima: el gruñido de los machos cesa y se transforma en rugido, y todos se lanzan al agua para juguetear. Nadan con habilidad sorprendente, se sumergen y se mueven en todas direcciones con una agilidad asombrosa; baste saber que pueden competir en velocidad con la barca de remeros más expertos. También cuando dormitan a la orilla de los ríos, si son inquietados por el hombre, demuestran ser menos lentos de lo que su mole hace suponer. En ocasiones se lanzan al agua desde una altura considerable.

Reproducción

Respecto a la reproducción, la duración de la gravidez y el nacimiento, se tienen datos bastante exactos que proceden de la observación de individuos en cautividad que se han reproducido varias veces. En cuanto a los hipopótamos en estado libre se sabe que la cría nace al iniciarse la estación de las lluvias, cuando la comida es más abundante y suculenta. La madre se preocupa constantemente del hijo y siempre cree que está amenazado por graves peligros. Es probable que también el padre vele por la prole. La madre es fácilmente identificable, pues no aparta la vista del pequeño y vigila sus movimientos con gran solicitud. Los pequeños suelen ser amamantados dentro del agua. A los tres años es apto para la reproducción, pero continúa su desarrollo corporal. Los colmillos se alargan y ganan en groso

r durante mucho tiempo, aun después de que el animal haya alcanzado sus dimensiones definitivas.

Daños

Puede decirse que el hipopótamo era antaño un animal nocivo, no sólo por los daños que provocaba devastando las plantaciones, sino también porque amenazaba la vida del hombre y la de ciertos animales. Sin embargo, no todos le con

sideraban peligroso. En algunas regiones resultaba más temible en el agua que en tierra; no obstante, era raro que atacase las grandes barcas, aunque hacía zozobrar frecuentemente las ligeras, tal vez por simple juego. Pero el hipopótamo es especialmente peligroso cuando defiende a sus crías.

Aunque popularmente se piensa que el hipopótamo es un animal tranquilo, pacífico y simpático, en realidad es uno de los animales más peligrosos del África y a él se deben la mayor parte de ataques humanos por animales en este continente, por delante incluso del cocodrilo del Nilo, las hienas o el león. Las personas que caen en las fauces de los hipopótamos lo hacen cuando se acercan imprudentemente a los animales sumergidos con una canoa y éstos confunden la embarcación con un cocodrilo, o bien cuando usan las sendas de los hipopótamos para llegar hasta los ríos y lagos en busca de agua. Los hipopótamos usan estos caminos para cubrir la distancia entre el agua y las zonas donde se alimentan por la noche, moviéndose por ellas a una velocidad increíblemente alta, lo que ocasiona a veces atropellos con consecuencias fatales.

Taxonomía y orígenes

Una señal advirtiendo de la existencia de una senda para hipopótamos en el Parque Nacional KrugerSudáfrica

Los restos de hipopótamos abundan en los depósitos de África, Oriente Próximo y EuropaGran Bretaña al sur de York). Éste último continente sólo era habitado de forma intermitente durante los periodos cálidos, emigrando los hipopótamos hacia el sur cuando arreciaban los fríos glaciares. Sobrevivieron en la Península Ibérica hasta hace unos 30.000 años, y en islas mediterráneas como Malta o Chipre hubo especies enanas hasta el Neolítico. En Madagascar y otras islas al este de África también se desarrollaron especies de pequeño tamaño, que desaparecieron a la llegada del hombre. Todavía en la Edad Antigua estaban presentes en el Bajo Egipto y Palestina, pero hoy han desaparecido de esos lugares y tienen una distribución muy irregular a lo largo y ancho del África subsahariana, tanto en la sabana como en la selva, aunque el ser humano ha ido acabando con ellos día a día. (incluida toda

Una forma afín, pero mucho menor, el Hipopótamo enano o pigmeo también llamado "Mali" (Choeropsis liberiensis), vive en las selvas húmedas de África occidental, pero no en número muy abundante.

Hipopótamos y humanos

Las evidencias más antiguas de interacción de humanos con hipopótamos proviene de huesos con marcas de cortes para extracción de carne hallados en Herto Bouri datados en aproximadamente 160,000 años.